- Che, vos perseguís la coincidencia, vos la fabricás, la inventás, la creás, como a mí y a las maquinitas que escupen inspiración...
- No lo sé, recién abrí el texto, leí la fecha...
- Piba ¿segura que no lo planeaste? En una de esas lo escribiste en algún papel mientras dormías...
- Quizá es uno de esos encuentros inesperados en cualquier esquina. Una cita jamás pactada a la que llegan todas mis voces, juntas. Como aquella vez cuando me encontré en su diario el diálogo imaginario con una mujer del futuro que seguro era yo, seguro era yo. ¿Me explico?
-Ya está, lo que ocurrió fue el poema...
- ¿Cuál poema?
-Ese, el que escribimos todas juntas mientras rompíamos los relojes y nos burlábamos del tiempo cronológico y sus falsas ataduras.